La Salud de la mujer es un imperativo social y económico que no podemos seguir ignorando. La mujer es el centro de las familias, es un gran motor de desarrollo y crecimiento en todas las áreas de la sociedad. Compartimos información sobre las brechas e inequidades que las mujeres enfrentan en el acceso a salud; las respuestas de nuestra industria basada en la innovación a estos desafíos; y datos que evidencian la urgencia de trabajar en soluciones conjuntas con diversos actores de la comunidad, con el fin de acelerar la igualdad de género en salud.

            Históricamente, los sistemas sanitarios han sido construidos a partir de datos y modelos basados, en gran medida, en hombres. Como consecuencia, hoy en día, las mujeres se están enfrentando a necesidades de salud específicas y dificultades para recibir un diagnóstico a tiempo, preciso y un tratamiento adecuado.

            Este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, queremos destacar la necesidad de cerrar las brechas de género en las atenciones de salud femenina, visibilizar las repercusiones de la falta de inversión para investigaciones e innovación centrados en las mujeres y compartir la forma en la que nuestra industria está reconociendo y dando respuestas a estos desafíos.

            Actualmente, las empresas líderes en innovación biofarmacéutica a nivel global asociadas en Ecuador en la Industria Farmacéutica de Investigación (IFI), no solo están aportando con innovación e inversiones en áreas de alta necesidad para las mujeres, como son: la vacuna del Papiloma, la histerectomía, anticonceptivos no hormonales, síndrome de ovario poliquístico, etc. Además, trabajan en campañas para informar, sensibilizar y promover cambios que mejoren su salud y calidad de vida, porque entienden que las mujeres son fundamentales para un mundo más saludable.

            Las mujeres representan más de la mitad de la población y las madres toman aproximadamente el 80% de las decisiones de atención médica en el mundo, según un estudio del Ministerio de Trabajo de los EEUU.(1)

            Así, las empresas de IFI no solamente están invirtiendo en investigación y desarrollo, sino que trabajan de la mano con la comunidad de salud para contribuir con soluciones que impacten positivamente en:

  • Ampliar el acceso a medicamentos y atención médica
    · Invertir en estrategias de innovación en la salud de la mujer
    · Fortalecer la diversidad, equidad e inclusión
    · Sensibilizar sobre las carencias y desafíos en todas las áreas de la salud para la mujer.

 

Mejorar la salud de las mujeres significa mejorar la salud de las sociedades y la economía global.

            Un estudio de Womens Health Access Matters (WHAM) muestra que el financiamiento en investigaciones de salud para las mujeres lograría un enorme impacto económico. Se estima que, en EEUU, una inversión de $300 millones de dólares, podría generar un retorno económico para ese país de $13 mil millones y reducir los costos de atención médica, mejorar la calidad de vida y devolver años de productividad a la fuerza laboral mundial.

            Por otro lado, el mismo estudio señala que, si se invierten $20 millones en investigaciones de enfermedades de las arterias coronarias enfocadas en mujeres, se obtendrían $2 mil millones en retornos para la economía estadounidense, se salvarían 28 mil años de vida que pudieron perderse, 12 mil años recuperados en fuerza laboral.

            A pesar de esto, en 2020, un informe de la FDA, Administración de Alimentos y Medicamentos de EE UU, aseguró que la inversión en investigaciones de afecciones específicas para mujeres se situó en torno al 1 %.Más adelante en 2022, la FDA informó que, de 37 medicamentos aprobados por esta Administración, solo 2 eran para condiciones especiales de ellas.

Las cifras a continuación hablan por sí solas sobre esta falta de financiamiento histórica en las investigaciones de salud para las mujeres. Es urgente mejorar estos índices: (2)

Fuente: Womens Health Access Matters Report https://thewhamreport.org/report/

Fuente:: WAHM NIH

* National Institute of Health,

            Las siguientes son condiciones de salud que podrían mejorar la calidad de vida de las mujeres en algunas etapas de su vida y que generarían importantes aportes de salud y económicos: (3)

Menopausia: Los calores o bochornos en las mujeres que atraviesan la menopausia, pueden durar hasta 10 años, provocando interrupción de sueño, reducción de energía y afectar la salud emocional y la productividad en el lugar de trabajo.

Salud materna es un problema importante. Diariamente en 2017, murieron cerca de 810 mujeres en todo el mundo por causas prevenibles relacionadas con el embarazo y el parto. Cada año, 15 millones de mujeres y bebés en todo el mundo se ven afectados por el trabajo de parto prematuro, lo que puede provocar una serie de problemas de salud, como bajo peso al nacer, dificultades para respirar, órganos subdesarrollados y problemas de visión.

La endometriosis es una condición común y crónica que afecta hasta 1 de cada 10 mujeres en edad reproductiva, causa dolor abdominal y está asociada con la infertilidad. También puede limitar las oportunidades económicas de algunas mujeres que experimentan un dolor debilitante que les impide ir al trabajo o a la escuela.

Fuente: XProject de Roche https://www.roche.com/xproject/xproject-es/

            A la falta políticas que fomenten la investigación y la atención centrada en la salud femenina, también se suma la falta de diversidad en el campo de la investigación médica y a la falta de financiación para proyectos liderados por mujeres, que empeoran esta problemática.

            Se estima que es más probable que los equipos de mujeres investigadoras se enfoquen en encontrar tratamientos para enfermedades que afectan a las mujeres; pero sus innovaciones siguen enfrentando sesgos para llegar al mercado.

            Las empresas asociadas a IFI están conscientes de que a través de una mayor equidad de género e inclusión, el Sector Salud tendrá más oportunidades para responder apropiadamente a las necesidades de las mujeres; es por esto que trabajan como una de sus prioridades en la inclusión activa de mujeres en roles decisivos, a nivel gerencial y directivo, al igual que en los ámbitos de innovación e investigación de nuevas tecnologías de salud, con el objetivo de aportar a la construcción de sistemas de salud fuertes e inclusivos para las mujeres, atendiendo sus principales necesidades.

            Recientemente, IFI concluyó un Estudio sobre el impacto de sus empresas asociadas a nivel social y económico en el Ecuador. El informe refleja que el 56,5% del empleo generado en la industria lo ocupan mujeres, mientras que en el país en su conjunto apenas un tercio de las mujeres cuenta con un empleo pleno. En promedio el 29% de los cargos gerenciales en esas empresas es ocupado por mujeres, cuando a nivel nacional ese porcentaje no supera el 20%.

            En el campo de la investigación y desarrollo, la industria biofarmacéutica asociada a IFI cuenta con miles de mujeres científicas y profesionales de las ciencias de la salud, que trabajan incansablemente para encontrar formas novedosas de atacar enfermedades y abordar amenazas emergentes. Actualmente, la industria tiene más de 8000 medicamentos en desarrollo y alrededor de 1.000 de ellos son tratamientos específicos para mujeres.

            Hay mucho por hacer y el tiempo apremia para cerrar las brechas e inequidades que enfrentan las mujeres en la atención en salud y acelerar la innovación para las condiciones específicas de la mujer, para transformar sus vidas y garantizar el progreso económico y social en el Ecuador y alrededor del mundo.

FUENTES: